mercredi, mars 15, 2006

Que llueva

Bronca y desenfreno total salen de una mano de uñas pintadas.
Debajo de las uñas, una luz encandescente ilumina la orilla del lago.
Los árboles entrecruzan sus ramas con movimientos suaves, tántricos.
Descruzo las piernas y siento el calambre absoluto que recorre esos noventa centímetros de piel, como hormigas rojas a punto de picar.
Arde.
Una fogata cerca, arde. Descruzo las piernas y hago círculos con el dedo índice en el pasto.
Un dedo, encuentra a otro, ajeno. Dos manos que se encuentran haciendo círculos de fuego frente al lago.
Las hojas de los árboles aún revolotean con el viento. Besos y caricias, mar y luna.
Bronca y una voz ronca sueltan al aire un grito de letras mezcladas.
La danza empieza.

3 commentaires:

Juan Manuel Bruñol Silvani a dit…

No lo sé...
Nunca diría nunca, pero tampoco diría siempre.

abrazo de gol

Juan Manuel Bruñol Silvani a dit…

Eso iba en el post de abajo!

Perdón!

G. a dit…

Niño espina, a veces creo firmemente en mi palabra. A veces.

Page copy protected against web site content infringement by Copyscape